Orgánicos con prácticas Biodinámicas

Respetando y cuidando cada uno de los componentes del ecosistema, filosofía que la familia Odfjell ha impulsado con pasión desde la fundación de la viña.

Trabajamos bajo los principios de la agricultura biodinámica, buscando estar en sintonía con la Madre Tierra y con la biodiversidad del ecosistema presente en los viñedos, fortaleciendo la conexión entre el hombre y la naturaleza.

El manejo orgánico de nuestros campos nos permite producir uvas únicas, respetando la identidad del lugar donde se cultivan. Esto se refleja en el sentido de origen que se encuentra en cada vino que producimos.

Cultivos Orgánicos

Todos nuestros viñedos son manejados y certificados orgánicos que prohibe el uso de pesticidas, herbicidas y fertilizantes sintéticos. Usamos el manejo integrado para trabajar en nuestro país y alentar la regulación natural de los viñedos, utilizando sólo componentes naturales para lograr este equilibrio.

En 2006, iniciamos la certificación de nuestros viñedos, primero en Cauquenes y Lontué. En 2012 completamos la certificación del 100% de nuestros viñedos. Ecocert certifica anualmente desde entonces.

Agricultura Biodinámica

La agricultura biodinámica está basada en las teorías y enseñanzas del filósofo austriaco Rudolf Steiner, quién en 1920 planteó el uso de recursos naturales en correcta armonía entre el mundo animal, vegetal y mineral, inserta en el cosmos. Su trabajo fue una reacción al impacto negativo de la agricultura industrializada y se basó en la sabiduría de las técnicas agrícolas ancestrales.

Las actividades agrícolas las desarrollamos y ejecutamos observando el calendario biodinámico, el cual está basado en los ciclos y la influencia que tiene el sol, la luna y los planetas sobre el cultivo.

Compost

El compost es fundamental para nuestros métodos de cultivo. Lo creamos a partir de los tallos de uva y el orujo que queda de la vinificación junto con el estiércol de nuestras vacas y caballos de fiordo durante casi un año. Una vez terminado el proceso, aplicamos este material orgánico al viñedo para restaurar y fertilizar los suelos de forma natural.

 

También la protección y fomento de especies nativas es parte de nuestra responsabilidad. Realizamos un trabajo de reconocimiento de aquellas especies existentes en nuestros viñedos.

A partir de estos estudios, hemos impulsado “islas ecológicas” en los viñedos que replican la flora y fauna existente en la parte alta de los cerros que los rodean, donde la intervención humana ha sido prácticamente nula. Quillayes, boldos, peumos, maitenes, espinos y quebrachos son parte de esta flora, la cual hemos complementado con conejos, reptiles, roedores y aves. En los años transcurridos desde que comenzamos a interconectar nuestros viñedos con nuestro entorno natural, muchas especies nativas de aves han regresado a nuestros viñedos.